jueves, 4 de diciembre de 2008

Arbol Navideño


Árbol Navideño

Dejé bajo el árbol mi sueño extraviado,
mis manos inquietas sin poder moverlas.
Y una sonrisa con sombras por la ausencia de sol.

Dejé un No rotundo a las balas perdidas,
al hambre silente en la boca de un niño
al canto sin voz de palomas sin alas
al abuelo escondido bajo extraños techos.

Dejé bajo el árbol de luces parpadeantes
un poema inconcluso para el próximo año.
Un deseo de amor entre las hojas marchitas
y un soplo de nieve con la espuma del mar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que un nuevo pino se alce en el ombligo del mundo,
con buenos augurios colgados
y entre moños colorados esperanza para todos.
En cada rama una estrella para alumbrar el camino
y en la base de sus manos nuestros sueños realizados
envueltos para regalo.


Besos, Gabriela Abeal

María Socorro Luis dijo...

Que se cumplan todos tus deseos.
Sobre todo los que se refieren a los que más los necesitan. Me uno.

Zorionak.